En nuestra cultura, el 2 de noviembre se celebra el día de los Fieles Difuntos. Pero es la víspera cuando tenemos por costumbre acercarnos hasta los cementerios, depositar algunas flores y visitar el lugar dónde están descansando las personas que ya han fallecido. Es una forma de no olvidarnos de ellos y de honrarlos. En Pozohondo además, la noche del 1 al 2 de noviembre se ilumina de una manera especial el cementerio de nuestro pueblo y los mayores solemos visitarlo.
Pero desde hace unos años está también cobrando fuerza la celebración de Halloween. Es una fiesta de origen celta que se celebra principalmente en los países anglosajones. Se suponía que el 31 de octubre los espíritus podían salir de sus tumbas y reencarnarse en cuerpos de personas vivas para de este modo volver a la vida. En la actualidad su celebración consiste en disfrazarse de brujas, mostruos, zombies,.... e ir pidiendo dulces puerta a puerta con "truco o trato".
Aunque son celebraciones distintas, una tiene un carácter más religioso y la otra más festivos, ambas están relacionadas con la muerte y con lo que se supone que hay más allá de ella.
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