Era un día soleado en el puerto de Indias. Desde allí salió un barco hacia el Océano Pacífico, con una lancha al lado por si se hundía. Pero dentro de la lancha se coló un polizón que quería hundir el barco. Lo iba hundiendo poco a poco y las personas dentro de éste se subieron a la parte más alta del barco para que no se ahogaran, pero por desgracia el barco se hundió. El capitán Pelirrojo, para orientarse, utilizó un astrolabio y de este modo saber dónde se localizaban y dónde se encontraban los astros para no perderse.
Después de unos días encontraron una isla pero en el trayecto se chocaron con un calamar gigante. Para matarlo le tiraban cocos a la cabeza y ramas del cocotero en los ojos. Entonces huyó y no les molestó más.
Después de unas horas vieron a lo lejos algo que brillaba y empezaron a agitar los brazos pidiendo ¡Socorro!
El submarino se acercó a la isla, subió del fondo del mar, salió el capitán del submarino y les dijo:
Después de unas horas vieron a lo lejos algo que brillaba y empezaron a agitar los brazos pidiendo ¡Socorro!
El submarino se acercó a la isla, subió del fondo del mar, salió el capitán del submarino y les dijo:
- ¡Todos a bordo!
Todos gritaron:
- ¡Si!
El polizón que estaba escondido detrás del cocotero no contestó y allí se quedó. Finalmente todos se fueron felices y contentos y el polizón se quedó allí para siempre.
El polizón que estaba escondido detrás del cocotero no contestó y allí se quedó. Finalmente todos se fueron felices y contentos y el polizón se quedó allí para siempre.
FIN
Equipo Medusa